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[DIASDEROBLE] Entretener no es tarea facil


El objetivo de un Game Designer, según un Game Designer.

 

Cuando pensamos en la palabra “videojuegos”, la mayoría de las personas asocian dicho concepto a la palabra “diversión”. La diversión es entretenimiento y es por eso que los game designer tenemos que pensar la mejor forma para que nuestro juego pueda entretener a la gente y dejar de lado esa tonta idea de que los game designer somos los dueños del juego. Si creemos que el juego es nuestro, difícilmente podamos dar un paso al costado e intentar ver lo que el público necesita y seguramente terminemos haciendo el juego que nosotros queremos jugar, cosa que no siempre termina siendo lo que el público quiere ver.

Cada persona, por ser un individuo único, tiene una forma distinta de entretenerse. Lo que nosotros podemos hacer, es agrupar estas formas de diversión en distintos círculos, para poder crear parámetros y hacer foco en lo que buscamos. Por eso, al mismo tiempo, es importante saber a qué público se apunta cuando se comienza a pensar un videojuego, la edad sobre todo, para poder empezar a agrupar gustos y afinidades y así tener una idea más acotada de lo que se tiene que buscar.

 

Por eso mismo, hay que tener en claro que nunca vamos a poder conformar a todos. Intentar conformar a todos sería un error, independientemente de lo que pase a fin de cuentas. Todos los años, las empresas más poderosas de la industria gastan miles y miles de dólares en investigación de mercado para poder conformar a la mayor cantidad de personas, y aun así, ellos saben que no pueden conformar a todos: intentan conformar a la mayor cantidad posible, que es distinto. Por eso, que nosotros como game designer intentemos apuntar tan alto, es un error de concepto. Hay que segmentar, enfocar, e intentar resolver todo desde ahí.

 

En el mundo de los videojuegos se puede ser original, eso está claro y es algo en lo que creo. Y también se puede ir a lo seguro, lo cual no está mal. Hay quienes ven a los juegos como un arte, y quienes los ven como un negocio, un producto. Lo importante no es apuntar a revolucionar la historia de los videojuegos, en el 2014, intentando crear un género nuevo. Los géneros ya están inventados e hiper poblados de ejemplos. Hacer una aventura gráfica no es ser poco original. Hacer un FPS tampoco. Lo importante es encontrar un diferencial, algo que te libere de la comparación, aunque la gente sea lo primero que hace. “Este juego es como el Candy Crush, pero tiene esto además y acá es distinto y esta parte es más divertida”. La comparación existe, pero aun así podemos diferenciarnos. Y si no lo hacemos, pero lo que hacemos es grandioso, el objetivo al menos para nosotros, será el mismo.

 

Claro, no es un trabajo fácil. Si bien la industria de los videojuegos en Argentina está en un momento importante, de crecimiento y expansión, la verdad es que seguimos siendo un granito de arena entre los grandes colosos. Y eso significa que siempre vamos a estar unos cuantos pasos detrás. Pero aun así, eso no quiere decir que nuestros juegos sean malos, aburridos, o poco originales. Depende de nosotros, game designers, encontrar el diferencial. Y cuando hablo de game designer, hablo de ellos (nosotros) por respetar una estructura. Un gran juego se le puede ocurrir a cualquiera, incluso a alguien que no tiene un “rotulo” dentro de la industria.

 

 

Hay quienes dicen que hoy en día, los juegos no son originales, solo tiene lindos gráficos. Y nada mas errado que eso. Que la tecnología nos permita crear gráficos increíbles, cada vez más reales, no quiere decir que el trabajo de los game designers quede opacado. Los gráficos son solo una capa más en un proceso de construcción que seguramente va a atrapar a la gente por su gameplay, por su forma de jugar, por su historia, por su narrativa. Porque entretiene. Déjenme nombrar, como ejemplo de esto, The Last of Us. Este juego no es lo que es por sus gráficos. El juego es lo que es gracias a que desde un principio la narrativa del juego nos mete en una historia atrapante y utilizando muchos recursos cinematográficos, nos propone un gameplay simple e intuitivo. Es un desafío constante para nuestra mente, para nuestra habilidad e inteligencia.

 

Decir que los juegos de hoy en día son lo que son gracias a los gráficos no solo es subestimar a quien consume, sino también, tener un gran desconocimiento de la industria. El game designer tiene que nutrirse de todo lo que esté relacionado con su trabajo. Debe saber apreciar varios conceptos para pensarlos y distribuirlos dentro de su juego. Un game designer debe investigar, e investigar significa también jugar. Alguien que juega mucho no es un game designer, eso está claro también, pero un game designer si debe jugar mucho, y de forma consciente, como parte de su trabajo, como tarea de investigación, aunque suene a excusa.

 

 

Si nosotros queremos hacer una aventura gráfica, seguramente debamos jugar a muchas de ellas, para encontrar patrones, ideas, conceptos, lo que está bien, lo que está mal, que debemos hacer, que no debemos hacer. Eso es investigar. Y en el proceso, aprendemos. Uno mira películas por ocio, pero también aprende mucho sobre “storytelling”. Lo mismo al leer. Y eso después lo plasmamos en nuestros juegos, en la forma de comunicar lo que queremos comunicar. El game designer termina siendo una esponja que aprende a absorber la mayor cantidad de datos posibles, para luego intentar plasmarlos en sus juegos, buscando el único cometido de entretener al público. De eso se trata la cosa. [i]

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